Galeano, Eduardo
Todos los uruguayos nacemos gritando gol y por eso hay tanto ruido en las maternidades, hay un estrépito tremendo. Yo quise ser jugador de fútbol como todos los niños uruguayos. Jugaba de ocho y me fue muy mal porque siempre fui un “pata dura” terrible. La pelota y yo nunca pudimos entendernos, fue un caso de amor no correspon- dido. También era un desastre en otro sentido: cuando los rivales hacían una linda jugada yo iba y los felicitaba, lo cual es un pecado imperdonable para las reglas del fútbol moderno.» Eduardo Galeano Este libro rinde homenaje al fútbol, música en el cuerpo, fiesta de los ojos, y también denuncia las estructuras de poder de uno de los negocios más lucrativos del mundo. Hace unos meses en alguno de los grupos de interés que suelo frecuentar, un profesor dedicado al fútbol solicitó colaboración por- que quería saber el el origen de «la Chilena». Estamos hablando de una habilidad futbolística que consiste en arquearse hacia atrás y en el aire pegarle a la pelota con el pié. Se suele utilizar tanto para rechazar una pelota cuanto para sorprender en un remate al arco desde una posición inesperada. Recuerdo un gol de Enzo Franchescoli en un Torneo de Verano jugando para River y contra alguna selección europea. Y también un gol de chilena del Tano Novello contra San Lorenzo. Y un rechazo de Mouzo de chilena en plena área rodeado de atacantes. Mientras consultaba el libro de Eduardo Galeano para contestar -con esa solidaridad por compartir el conocimiento que nos carac- teriza a los adictos al correo electrónico- se me ocurrió cuántas cuestiones nos dedicamos a enseñar y de las cuales pareciera ser que sabemos muy poco. El libro de Galeano permite acercarse a una mirada sobre el fútbol: sus mitos, su historia, sus personajes. En una galería que va desde Maradona a Pelé, pasando por Garrincha y Sanfilippo; desde los viejos enfrenta-mientos del fútbol rioplatense hasta los clásicos Fla y Flu, pasando por los Mundiales. Es posible enterarse sobre el origen del fútbol mismo, de la pelota, de los manejos del fútbol-negocio de la FIFA y Havelange, del gol «olímpico», de la gambeta y del creador de la mismísima «chilena». Y hay mucho más..