Cristóbal, Pilar
Con todo el desenfado del mundo, un desparpajo y una concisión magistral, y no poca ironía, "Relatos para leer con una mano" nos va mostrando, a lo largo de su recorrido, una sexualidad sin tapujos, sin traumas ni complejos, sin ese sentimiento de culpa tan al uso en nuestros tiempos, una sexualidad saludable y diáfana en todas sus facetas. Menos en un caso -tenía que haber una excepción que confirmase la regla, aunque pretendida, por supuesto- que protagoniza el "Pepejota" de turno, todo un prohombre "dirigiendo con mano dura y prepotente la política del país", "de nalgas inmensas" y unos gustos que pueden revolver las tripas del más templado, o de la más templada...