Simenon, Georges
Émile Maugin es un actor parisino de teatro y cine que, a sus cincuenta y nueve años, saborea el éxito y el reconocimiento, al tiempo que vive felizmente casado en terceras nupcias. Sin embargo, durante una visita rutinaria al médico, éste le diagnostica un problema de corazón y le recomienda evitar los excesos. Llega entonces el momento de reflexionar: Maugin tiene cinco películas en perspectiva, más una obra de teatro en cartelera, poco tiempo y ciertos vicios «ineludibles». En casa se muestra igual de caprichoso e imperativo que entre bambalinas. Poco a poco, el miedo a morir lo lleva a recordar su pasado: sus orígenes humildes, sus anteriores mujeres... Para paliar la angustia, decide descansar por vez primera en su vida, y se marcha una temporada con su familia al sur de Francia, con la esperanza de recuperar su salud. Quién sabe si aún está a tiempo de restablecerse, o, al menos, de encontrar un sentido a su vida. Simenon redactó Los postigos verdes en Carmel, California, en enero de 1950. La novela, considerada por su autor como una «obra capital» en su producción literaria, recrea un episodio de su vida. A finales de 1940, Simenon se encontró en una situación parecida a la de su personaje. A raíz de un accidente en el bosque de Vouvant, se hirió en el pecho y fue víctima de un error médico, cuyo diagnóstico se tomó como un veredicto de muerte. Puesto en lo peor, Simenon vivió dos años de espera y angustia. Diez años más tarde, escribió esta novela que, en palabras de su autor, se inspira en una situación que no tenía nada de ficticio.