Valle-Inclán, Ramón María del
Tirano Banderas, centrada en un dictador de perfil grotesco, presenta una caricatura feroz de otros muchos personajes. Las múltiples anécdotas, algunas estremecedoras (el hijo de uno de los rebeldes muere mordido por unos cerdos), revelan una poderosa invención, del todo oportuna y eficaz para crear el tono fantasmagórico del conjunto de la obra, no ajeno al ambiente exótico y lujurioso en el que se desarrollan los hechos.