Mure, Pierre la
«MOULIN ROUGE» es la dramática historia de un singular personaje: Henri de Toulouse-Lautrec, aristócrata francés y pintor genial, en cuya vida Se amalgaman, en violento claroscuro, los más tenebrosos abismos de la pasión amorosa con los sublimes arrebatos de la creación artística. Un accidente desgraciado y una cruel enfermedad en su infancia, dejaron convertido al protagonista en un enano feo y deforme, cuya existencia sería un forcejeo incesante entre su casi repulsiva apariencia y sus ansias de vida, de amor y de belleza. En la pequeñez de su cuerpo, Henri de Toulouse-Lautrec albergaba un alma de gigante y un corazón grande y fogoso, de sangre enardecida como la de todos los Toulouse, cuyo linaje, uno de los más preclaros de Francia, se remonta a los primeros tiempos de las Cruzadas. Ese linaje se extinguirá con el protagonista de «MOULIN ROUGE», al mismo tiempo que morirá también toda una época, la del fin de siglo en París, evocada de mano maestra por Pierre La Mure, como antes la había plasmado en centenares de lienzos admirables el propio Toulouse-Lautrec. Cuatro mujeres dominan en la vida de Toulouse-Lautrec: Denise, la joven aristócrata que constituirá su primera decepción sentimental; María Charlet, la muchacha de la calle que le hará conocer un amor incapaz de saciar su espíritu; Myriam, que acaso le hubiera dado cuanto él ambicionaba en sus sueños mejores si el propio Toulouse-Lautrec hubiera sabido advertirlo a tiempo, y, finalmente, su madre, que le amaba entrañablemente. Esta figura de la madre, pone en el libro un acento de emocionada ternura, que es como un bálsamo sobre todas las heridas de su protagonista. Por esto, al doblar la última página, no le queda al lector un regusto amargo ni una impresión deprimente, pese a les dramáticos momentos que le ha dado conocer el autor, Pierre La Mure, a quien ha consagrado definitivamente el resonante éxito que ha alcanzado con esta obra.