Minier, Bernard
Lluvia, viento huracanado y un ferri que, en mitad de una noche gélida en el océano Pacífico, se bambolea a merced de las olas. Ajenos al temporal, dos adolescentes, Henry y Naomi, se pelean en cubierta. Al día siguiente, el oleaje arrastra el cuerpo inerte de ella atrapado entre redes de pesca. Henry tiene dieciséis años, y la burbuja sobreprotectora en la que ha crecido está a punto de estallar, provocando un giro radical en su vida y en el lugar en el que reside desde siempre, Glass Island. Situada frente a la costa de Seattle, esta isla azotada por las tempestades, cubierta por la bruma durante todo el año y accesible sólo por ferri, es un paraje en el que todo el mundo se conoce y muy pocas cosas pasan. O así lo creía Henry hasta ahora. Principal sospechoso del asesinato de su novia, Henry tiene que de demostrar su inocencia, sin saber que desde hace mucho tiempo algunas personas observan y diseccionan su vida. El reloj corre en su contra, así que, ayudado por sus fieles amigos, empieza a investigar la muerte de Naomi… y acaba descubriendo los secretos más oscuros e inimaginables de los habitantes de Glass Island. Una intriga perfectamente hilvanada que combina amor y temor, ruido y furia, y en la que Bernard Minier pone al descubierto el impacto de las nuevas tecnologías en las generaciones más jóvenes. Con una trama cargada de tensión y giros inesperados que nos hielan la sangre, Una maldita historia no deja de sorprendernos y sobresaltarnos de principio a fin. Maestro del thriller y as del suspense, Minier nos mantiene en vilo hasta la última página y firma una novela tan aterradora, potente y palpitante como lo mejor de Stephen King.