Mitchard, Jacquelyn
Beth Cappadora viaja con sus hijos a Chicago para asistir a la fiesta del decimoquinto aniversario de su graduación. Al llegar al hotel de reunión, Beth pide a Vincent, el hermano mayor, que vigile al pequeño Ben mientras ella va a inscribirse en recepción, pero, cuando vuelve a buscarlos, Ben ha desaparecido. «Lo más probable es que esté dormido en un armario», sugieren sus viejos compañeros de instituto para animarla, pero pasan las horas y Beth pierde la esperanza de que se trate de una simple travesura infantil. La policía lo deja bien claro al llegar al hotel: a falta de pruebas, la desaparición del niño de tres años se considera un caso de secuestro. Sea como sea, los peores presagios que pueden atormentar la mente de una madre se han hecho realidad. La trágica desaparición de Ben sume a Beth en una angustia difícilmente soportable, en la que al dolor de la ausencia se une un abrumador sentimiento de culpabilidad y la necesidad de, pese a todo, seguir adelante. Diez años después, con Vincent convertido en un joven delincuente, nuevas pistas sobre el paradero de Ben dan un vuelco inesperado a la historia..., pero lo que podría creerse el final feliz de un desgraciado suceso da paso al conmovedor relato de la recuperación del amor y la confianza de alguien que, tras una década, es ya una persona distinta.