Arias, Eduardo
Gijón, verano de 2010. El cadáver de un hombre trajeado aparece bajo un puente en un parque de la ciudad. Lorenzo Blanco, un joven detective privado, apasionado de los deportes, el cine y la novela negra, es contratado inesperadamente para resolver esta misteriosa muerte a la que la policía ha dado carpetazo sin apenas investigar. ¿Suicidio, asesinato, conspiración? Poco después, otro violento fallecimiento, esta vez en la Semana Negra, sobresalta a la ciudad y pone en jaque a una junta de gobierno que ya se encontraba en entredicho por sus poco acertadas decisiones políticas. Dos casos aparentemente inconexos que podrían ser sólo la punta del iceberg de algo mucho más gordo. Respaldado por Sara Paredes, una joven traductora, y algunos amigos entre los que destaca Miguel Canales, ingeniero de telecomunicaciones y entusiasta de los videojuegos online, Lorenzo tendrá que valerse de su ingenio y hacer frente a numerosas complicaciones mientras poco a poco va acercándose a una realidad que algunos pretenden por todos los medios que no salga a la luz.