Torres, Maruja
Si la vida no la hubiese agarrado por los pelos, obligándola a destapar compartimentos interiores cerrados, por miedo, a cal y canto, Manuela jamás habría vuelto al universo sórdido y reducido donde transcurrió su infancia, un lugar del que logró escapar, pero no sin que dejase en su alma una herida que, pasados treinta años, aún sigue abierta. Huyó de todo sin mirar atrás, dejando conflictos sin resolver, dudas, frustraciones y sentimientos confusos de rencor y cariño que ahora, tanto tiempo después, reclaman su regreso...