Sánchez-Ros, José María
En 1614, una embajada japonesa llega a Europa enviada por Date Masamune, señor de Sendai. El samurái Hasekura dirige la expedición a la que acompaña un sevillano, el franciscano Luis Sotelo. El propósito de la embajada era abrir una ruta de comercio entre Japón y España, y conseguir para los franciscanos un segundo obispado. Fernando Japón y Mauro Caro descendientes de aquellos japoneses que se quedaron en Coria del Río son las dos voces que cuentan la historia. Fernando Japón, aquejado de una grave enfermedad, le pide a su amigo Mauro Caro que concluya la novela sobre Hasekura, que el primero empezó. En Praga visitando la tumba de Kafka Mauro Caro conoce a la japonesa Fumiko Wasaki a quien participa su intención de escribir la novela sobre Hasekura. La japonesa se convertirá en la musa y confidente de Mauro. A través del relato histórico de la embajada los narradores reflexionan sobre el encuentro fugaz entre dos mundos tan distintos, como eran el Japon feudal de los Tokugawa y la España de los Austrias de nuestro siglo de Oro. Fernando Japón y su alter ego Mauro Caro se cuestionan las causas del fracaso de la embajada, analizan los antecedentes y desgranan las consecuencias de aquel viaje tan extraordinario. El reposado y audaz Hasekura compartirá su viaje con el impulsivo franciscano Sotelo. La pareja del franciscano y el samurái se convierte en un referente cervantino que recorre toda la novela. El fondo histórico del relato retratado con el detalle y la fidelidad que se deriva de un estudio exhaustivo de la embajada, se compagina con el artificio de la ficción para contar una historia de amor y de pasión por la literatura. El insólito viaje del samurái Hasekura es,como dice Susana Jakfalvi , un novela de ficcion y no ficcion que compagina el relato histórico con la novela fantástica, el ensayo y la metaficcion.