Queen, Ellery
Si la víctima ama la música y los crucigramas, parece lógico buscar en torno a esas aficiones para descubrir el nombre de su asesino. Así lo piensa el célebre y astuto Ellery Queen, pero los hechos se empeñan en contradecirlo. Sin solución aparente, el enigma es sin embargo tan claro como un crucigrama del que se tienen las respuestas, y el lector se sorprenderá de no haberlo desentrañado hasta el imprevisible final.