García Sáenz, Eva
Manacor, 1929. Denis Fortuny, el primogénito del imperio de las perlas de imitación de lujo, es acusado por sus hermanos de ser hijo de su tío Bastian, a quien él odia. Pocos días después de reunirse con sus hermanos, su madre, Laia Kane, desaparece y encuentran su cadáver en un barranco.La policía investiga el suicidio o asesinato de la matriarca y va sospechando de todos los hijos del matrimonio hasta que Denis, presionado porque está a punto de ser detenido, huye a Tahití para averiguar la verdad de sus primeros años y de la relación entre su madre y su tío Bastian. Menorca, 1890. Adelaida Kane, Laia, es la hija de un cónsul inglés corrupto que es exiliado por la reina Victoria a Tahití, en las recientes colonias francesas de la Polinesia. Durante el trayecto en barco mueren la mitad de los pasajeros, debido a las fiebres tifoideas, entre ellos la madre y los tres hermanos de Laia. En el barco conoce a dos hermanos mallorquines, Bastian y Hugo Fortuny, que también viajan rumbo a Tahití, ellos en busca de una oportunidad después de quedarse sin trabajo debido a una crisis económica que ha cerrado muchos talleres de soplado de vidrio en Mallorca. La vida de Laia, Hugo y Bastian quedará entrelazada y marcada para siempre desde su primer encuentro.