Boyne, John
Después de perder a su anciano padre, la joven Eliza Caine no tiene más opción que aceptar un puesto de institutriz en la mansión de Gaudlin Hall, en Norfolk. Pero lo que debería ser un trabajo digno y sencillo se convierte en una experiencia espeluznante. En cuanto se apea del tren, un par de manos invisibles intentan arrojarla a la vía, y cuando finalmente llega al caserón, los únicos que salen a recibirla son dos niños, Isabella y Eustace, que aparentemente viven solos. Eliza no sabe quién la ha contratado, y una serie de extraños sucesos la convencen de que algo muy grave está ocurriendo en la casa. Es como si una presencia maligna, que parece querer proteger a los pequeños, se manifestara continuamente, por lo que Eliza comprende que deberá desvelar los secretos que Gaudlin Hall guarda celosamente.
Autor de éxitos mundiales como El niño con el pijama de rayas y La casa del propósito especial, John Boyne ha escrito una novela inquietante que cautiva al lector hasta la última página. Como un homenaje a la novela gótica del siglo XIX, con abundantes guiños a Charles Dickens y Wilkie Collins, su valerosa e inteligente heroína logra superar el miedo a lo desconocido con una fortaleza de espíritu encomiable.
Una novela maravillosamente siniestra [...], un magnífico viaje a través del miedo, que muestra no sólo cómo éste se crea sino también cómo puede superarse. The Guardian
Una lección de narración clásica. Boyne trabaja deliberadamente dentro de la tradición y sin embargo nos sumerge en un relato muy original y entretenido que, como todas las historias de fantasmas, reserva su giro inesperado para el final. The Sunday Independent
Una aventura que encantará a los fans de Dickens e intrigará a quien se atreva a acompañar a la heroína en su viaje. The Daily Express
Escrita con brillantez y contención clásica [...]. Boyne logra crear tensión no a partir de los elementos claramente reconocibles sino gracias a la narradora: una mujer de buen corazón atrapada en un mundo claustrofóbico, una protagonista cuya capacidad de adaptación y fortaleza de ánimo nos resultan enormemente atractivas. The Telegraph