Ackerley, J. R.
En 1921, E. M. Forster a su regreso de su segundo viaje a la India le sugirió a su amigo Joe Ackerley que se postulara para el puesto de secretario del Maharajah de Chhatarpur. Ackerley, de veintiséis años, salía de Cambridge, no tenía empleo, llamaba la atención por su extraordinaria belleza física, y compartía los gustos homosexuales del extravagante soberano, que en realidad no pedía más que un interlocultor y acompañante. El diario que el lector tiene en su manos narra sus cinco meses de ’vación hindú’, que se publicó diez años después, en 1932.