Sender, Ramón J.
Siete domingos rojos narra el desarrollo de una huelga general convocada como protesta por la muerte de tres obreros en un altercado contra la policía, que intentaba suspender un mitin anarcosindicalista. El significado del título es evidente: siete no son sólo los días de una semana, es el número mágico y bíblico; en los domingos no se trabaja, hay una tarea extraordinaria, la creación del mundo nuevo revolucionario; rojos por la violencia, la muerte y la generosidad de la entrega.
En esta novela, temprana aunque también una de las más vigorosas de su extensa producción, Sender nos traslada durante una semana a la vida cotidiana del Madrid obrero de los años treinta, colapsada y alterada por los disturbios y la represión, e impregnada por el espíritu anarquista. Con abundantes dosis de reportaje, con no pocos ingredientes extraídos de su propia circunstancia personal, el autor traza las líneas maestras del anarquismo español en el periodo republicano. Samar, el protagonista, recuerda al propio Sender tanto por la pasión con que se inmiscuye en las luchas sociales de su tiempo como por el afán reflexivo mediante el que pretende distanciarse del torbellino de la historia para entenderlo mejor.