Forner, Rosetta
¿Eres Reina o Damisela? No te niegues la vida, no te quites la corona para parecer menos alta y que así tu caballero de armadura demasiado oxidada se sienta cómodo en su altura junto a ti. Para poder dar amor del bueno, para poder amar incondicionalmente, primero habrás tenido que independizarte emocionalmente, lo cual equivale a “amar a corazón abierto, con toda la integridad y honestidad de tu alma, y la valentía y coraje suficientes como para largarte de la relación si la otra persona te traiciona, deja de amarte o no te ama con la calidad de amor que tu alma y nivel de conciencia requieren. Detrás de toda Reina existe una historia con su punto de fantasía pero repleta de vivencias que querrían ostentar el rango de olvidables, de amores que nacieron limpios y luego extraviaron el sentido. Detrás de toda Reina hay una historia de inocente corazón, y desconocida corona. Detrás de toda reina hay un sueño de búsqueda eterna por cuya consecución es capaz hasta de empeñar la corona y de afrontar los demonios más oscuros. Detrás de toda reina hay una historia confesable de amor perdido, traicionado, hallado, soñado, sentido, ignorado y aprendido. Dentro de toda reina existe un alma fuerte que arriesga todo con tal de vivir su vida y alcanzar el destino de su corona.