Comyns, Barbara
Alice vive con su madre enferma y su padre, un veterinario despótico y brutal, en una vieja casona de un oscuro barrio de Londres. Encima de la chimenea tienen un cráneo de mono, y en el suelo la piel de un gran danés. La madre muere, y el padre la reemplaza por una tabernera que no tarda en comportarse como una indecente madrastra.
Alice tiene, pese a todo, un joven que la admira, Ojitos, y un don «peculiar» que le da paz... pero del que no se atreve a hablar con nadie. Además, ella no quiere ser «peculiar».