Eaton, George L.
Tres hombres estaban sentados en una de las habitaciones interiores de una suite del piso quince, en un alto edificio de la capital de la nación. En la puerta de entrada que daba al pasillo, estaba pintado un nombre: Liga del Aire del Futuro.
En una mesa de trabajo, en la oficina exterior, se sentaba un hombre de cara pálida, de edad indeterminada. Leía una revista. Tenía unas orejas que sobresalían de su cabeza como las palas de un molino de viento. Dentro de su cabeza había un cerebro que era tan pequeño como eran de grandes las orejas.
Si su cerebro hubiera sido tan grande como sus orejas, podría haber oído y comprendido algo de la conversación que tenían los tres hombres en la habitación interior. Y escuchando podría haber salvado también una veintena de vidas.
Porque aquellos hombres hablaban de muerte, y de destrucción y sesinato en lo alto del cielo.