Steiner, Jean-François
Treblinka no era un campo de concentración, era un campo de exterminio. Muchos de los hombres, mujeres y niños encerrados en él murieron. Pero, un día, algunos de los supervivientes organizaron la más extraordinaria aventura que jamás haya tenido lugar en un campo de muerte: la rebelión de los esclavos contra sus amos. Seiscientos judíos consiguieron escapar. De ellos sólo han sobrevivido cuarenta, los cuales han podido dar este escalofriante testimonio.