Dickens, Charles
Al morir su marido cubierto de deudas, la señora Lirriper abre una pensión en el 81 de la calle Norfolk, en Londres, para pagar a sus acreedores e iniciar una nueva vida. «Si las paredes de esta pensión pudiesen hablar […] tendrían tantas cosas que contar…» Una extensa galería de personajes genuinamente dickensianos desfila por estas páginas.