Gibson, Rachel
Desastre número uno: los hombres.
Faith aprendió a no creer en el amor a base de desengaños. Pese a todo, cuando se casó con su muy rico, y muy anciano, marido, se convirtió en la esposa perfecta. Y luego él se fue al cielo, dejando a Faith noches solitarias, un montón de dinero y un problema enorme con un equipo de hockey profesional. ¡Vaya, pero sí Faith no ha visto un partido de hockey en su vida!
Desastre número dos: la pasión.
Pero prácticamente toda América y la mitad de Canadá siguen los pasos de Ty Svage. Su letal atractivo y su mortífero gancho de derecha hace que sea el preferido por los fans. Durante la mayor parte de su vida, el sueño de Ty ha sido ganar la Copa Stanley. Lo último que necesita es que un bomboncito eche por tierra sus planes.
Desastre número tres: el amor.
Faith detesta a Ty a primera vista, pero éste no puede dejar de pensar en ella día… y noche. Entonces, un momento de debilidad termina con Faith en la cama de Ty y ésta comienza a ver que ese hombre es mucho más que la atractiva fachada que tanto gusta a todos. Ty descubre que Faith es mucho más que su belleza y los millones que posee. Pero una relación con Faith es del todo imposible, y enamorarse… eso sí que sería un desastre.