Shan, Darren
Una vez cada cierto tiempo (ahora sabía que era cada doce años), los Generales se reunían en una fortaleza secreta para discutir sobre lo que quiera que fuese que esas criaturas nocturnas bebedoras de sangre discutían cuando estaban juntas. No acudían solamente los Generales (había oído que los vampiros corrientes también podían ir), pero la mayoría lo eran. Yo no sabía dónde estaba esa fortaleza, ni cómo se iba hasta allí, ni por qué tenía que presentarme ante el Consejo. ¡pero lo iba a descubrir!