Núñez, Raúl
Sinatra se parecía a Sinatra. Tenía 40 años. No era demasiado alto. Se había empezado a quedar calvo y llevaba el pelo muy corto. Había conseguido un trabajo de portero de noche en la pensión donde vivía. Le salía su habitación gratis y le quedaba un poco de dinero. Hacía un año que su mujer lo había dejado para irse con un negro. Tenía gracia. le parecía una broma. Siempre que pensaba en ello, un sonrisa torcida aparecía en su boca. La misma sonrisa torcida con la que se enfrentaba al mundo. Ahora no tenía mujer. Le costaba aceptarlo. Se sentía solo.
"Sinatra se parecía a Sinatra". Así empieza esta novela sobre un hombre solitario —muy parecido físicamente al famoso actor y cantante— que trabaja de portero de noche en una pensión barata de la calle Hospital. Una noche, al ojear una revista, lee el anuncio de un club de amistades por correspondencia y decide hacerse socio. A partir de entonces su vida, monótona y oscura, comienza a complicarse. Otros seres como él, enajenados por la soledad y la falta de afecto, lo van cercando con sus cartas y sus apetencias. Uno a uno, van haciendo su aparición desde el fondo de su marginación emocional o física, como patéticos fantasmas engendrados por el cemento de la urbe.
Las putillas de Ramblas abajo, los salones de bingo, la sórdida recepción de una pensión, La Plaza Real y los bares del Barrio Chino son algunos de los elementos y escenarios que Raúl Núñez elige para desarrollar su obra.