Mujica Lainez, Manuel
"Creo que lo he fascinado, y sé que él me ha fascinado también. Presumo que nos perteneceremos el uno al otro hasta que la muerte ocurra". Así comienza Cecil, y quien así habla es precisamente el narrador que da título a la novela, que no es otro que un perro de raza whippet, regalado por unos amigos al escritor Manuel Mujica Láinez y bautizado con ese nombre el honor al fotógrafo inglés Cecil Beaton, al que el autor conoció el día en que le fue obsequiada su nueva mascota. Estamos por lo tanto ante una ingeniosa novela autobiográfica narrada mediante un personaje interpuesto, escrita en un momento de crisis creativa de su autor, en el momento en que abandona Buenos Aires y se instala en la recién adquirida quinta El Paraíso, en la provincia de Córdoba.