Ferguson, Austin
“Aerolíneas Century” inaugura el primer vuelo comercial de Estados Unidos a China, llevando a bordo a grandes personalidades políticas y diplomáticas, que incluyen algunas hermosas mujeres, como Eileen Morgan, la reportera de TV, y Candy, la provocativa y exuberante hija del embajador en China. Parece que será un vuelo turístico sin más preocupaciones que charlar o resolver conflictos personales...
Pero cuando ya han pasado la línea de «no retorno», el motor número 3 hace explosión: la situación se torna crítica y la angustia y el miedo invaden a los pasajeros. Los únicos aeropuertos cercanos pertenecen a la Unión Soviética y el Presidente de Estados Unidos ordena por radio-teléfono que de ninguna manera se aterrice en ellos porque el aparato lleva una carga secreta que no deben encontrar los rusos. La otra alternativa es el océano Pacífico.
El autor demuestra su amplísimo conocimiento de la técnica aérea y el «suspense» no se desliga ni un segundo del conocimiento real de lo que puede hacer un DC-10 en vuelo en condiciones críticas que se van agravando en cada segundo.
Una novela de las que «agarran» al lector y no lo sueltan hasta el extraordinario pero verosímil desenlace.