Wu Ming
La novela registra un vasto conglomerado de personajes y subtramas.Es 1954, Iósif Stalin ya está muerto, Yugoslavia es el único país socialista que ha decidido romper relaciones con la Unión Soviética, y el llamado "territorio libre" de Trieste es disputado entre Italia y el país colindante vecino. En Italia, el descontento se ha extendido entre los ex miembros de la Resistencia Italiana, debido a que el gobierno Demócrata Cristiano consintió que muchas figuras de relieve que formaban parte del Fascismo pudieran volver a la vida pública e institucional, y también porque varios ex partisanos son perguidos a causa de sus actividades de guerrilla, ya que fueron tomadas fuera de contexto y consideradas como acciones criminales. En Nápoles, el capo mafioso Lucky Luciano está supervisando la creación del tráfico mundial de heroína. En Bolonia, un grupo de comunistas gruñones pasan el rato en el Bar Aurora. El local está administrado por los jóvenes hermanos Capponi, cuyo padre luchó en Yugoslavia y decidió quedarse allí después de la guerra.En los EE.UU., la caza de brujas anti-comunista llevada adelante por Joseph McCarthy ha alcanzado su cima. En Hollywood, Cary Grant está tremendamente aburrido con su nueva vida después de haberse retirado de su carrera como estrella de cine. Tanto Alfred Hitchcock como el MI6 están intentando convencerlo para que vuelva a actuar. Mientras que la propuesta de Hitchcock es clara y precisa (el maestro del suspence está preparando la filmación de To Catch a Thief [Atrapa a un ladrón]), aquella del MI6 es vaga y poco plausible: Grant tiene que viajar a Yugoslavia para encontrarse con el presidente Tito, y conversar con él sobre el deseo del Mariscal acerca de su cooperación en la industria cinematográfica occidental. El MI6 considera que una película biográfica basada en el liderazgo de Tito en la resistencia balcánica puede ser un arma valiosa para la guerra psicológica en la URSS.Un papel clave en el despliegue paralelo de estas subtramas lo juega un televisor estadounidense, un McGuffin Electric DeLuxe que es robado de una base aliada militar en Italia meridional, luego vendido en el mercado negro y posteriormente pasado de un comprador a otro porque ninguno es capaz de hacerlo funcionar. “McGuffin” es un personaje real y sensible, los autores se refieren al mismo como “él” y siguen “sus” flujos de conciencia a lo largo del libro, dado que reflexiona sobre los toscos modales con que los italianos lo están tratando.