Ancira, Lola
El vals de los monstruos de Lola Ancira es un libro que ansía permanecer, no encallar en la indolencia. No lo hace por medio de la zarpada letal, sino de una forma lenta y parsimoniosa, aumentando el azoro de los lectores. Lo monstruoso en estos cuentos radica en el entramado de lo atroz de las pasiones humanas que rayan en la universalidad literaria. Muchas de las historias están concebidas desde el anonimato de sus personajes, porque en realidad no son tan importantes los nombres, sino las acciones, que en cada caso culminan con el tiro de gracia propio de la prosa de Ancira, que nos recuerda por momentos la de Amparo Dávila, Francisco Tario, Julio Cortázar o el propio Jorge Luis Borges, por los enigmas que hay en cada desenlace finamente erigido en su construcción. Once relatos constituyen el vals de unos monstruos que no tienen una deformidad física, sino mental, y con esa premisa danzan al unísono sin otorgarnos un solo momento de sosiego, porque después de cada pieza, el dramatismo irá in crescendo hasta sofocarnos. Seremos testigos de hasta dónde son capaces de llegar por calmar sus obsesiones o por no terminar en el olvido que, al parecer, para Lola Ancira, es mucho más doloroso que el acto de morir.