Páez Varela, Alejandro
En esta novela, todo se paga y se corresponde. Si hay buena voluntad de una parte, la habrá de la otra; si no la hay sólo queda la opción de escapar hasta que se cumpla la sentencia fatal. El autor no perdona a sus personajes porque en ese México recreado por el lenguaje, el concepto de perdón lo poseen sólo algunos sujetos, que como en el mundo real y tangible, son los menos y casi nunca aparecen. Pareciera que todos pagan, los que deben mucho, los que deben poco y los que nada deben. El reino que propone Páez Varela es uno en donde, al modo de la vida misma, los personajes femeninos determinan la historia, ya sea porque influyen en ella, ya sea porque en ocasiones la historia misma gira en torno a ellas. Y sin embargo, no es un reino sólo de mujeres. Ellas son los cimientos y la techumbre de la casa narrativa donde sucede la gracia y la tragedia al estilo del norte.