Raina, Rahul
Arranca entre Mr. Ripley y Parásitos y se convierte en un tren bala donde huele a sudor, risa, rabia de clase y colonia cara. La gran novela de arribistas ya tiene su versión india, pulp, ácida y tremendamente actual. Bravo. MIQUI OTERO Como si los hermanos Coen hubieran contratado a Juan Marsé y se lo hubieran llevado a la India. Si eres rico y tienes un hijo vago, pero quieres que entre en una de las mejores universidades del mundo, seguramente ya sabes que el dinero lo compra todo. Pues de eso vive Ramesh, un chico con una inteligencia privilegiada que creció en la pobreza de la vieja Delhi. La promesa de Ramesh es sencilla: le llamas, le explicas quién es tu hijo, qué nota necesita sacar y cuánto dinero estás dispuesto a pagar; Ramesh se hace pasar por tu hijo, hace el examen de acceso a la universidad y te garantiza uno de los mejores resultados. Pero esta vez Ramesh lo ha hecho demasiado bien y ha convertido a su último cliente, Rudi, en el estudiante con la calificación más alta de toda la India. Acto seguido Rudi se hace famoso y Ramesh se ve obligado a quedarse a su lado, siempre que este le dé el 10% de sus ingresos, claro. Y justo aquí la historia empieza a complicarse porque ya se sabe que a los pobres se les niega la justicia hasta en las mejores novelas. Sátira social y novela criminal al mismo tiempo, Cómo secuestrar a un rico es una adictiva montaña rusa literaria que saca punta a la rabia de clase con eléctrica travesura. El primer secuestro no fue cosa mía. Los otros... sí