Izarzugaza, Galder
Meritneith ha estado gobernando en un segundo plano durante los dos últimos años debido a la enfermedad de su marido, el rey Djet. Cuando enviuda se encuentra con que su hijo no es más que un niño y que alguien tendrá que hacerse cargo del país y de la educación del príncipe.Decide dar un paso al frente y, con la ayuda de leales servidores de la corona, tratará de conservar el trono para su hijo al mismo tiempo que tendrá que velar por el país.Los dioses parecen bendecir la regencia de Meritneith, pero gobernar un país como Egipto no es fácil: la crecida puede no ser suficiente, los asiáticos a las puertas del país, los libios sembrando el terror con sus incursiones rápidas y mortales y los nubios, los enemigos acérrimos del sur, también son levantiscos.Es el momento de Meritneith.