Vélaz, José Luis
París. Primavera, 1914. Mark Reber, financiero, pintor y poeta alemán, vive sumido en el encanto sensual de la belle époque: dinero, arte, fiestas, cabarés, cancán y champán. París es una fiesta. Europa es una fiesta… Parece que nunca más devendrá la guerra… pero, en los más recónditos centros del Alto Mando de los Ejércitos imperiales, surge el recelo. Un día conoce a un importante magnate americano capaz de obtener todo lo que con dinero es posible conseguir. Tras el éxito de una rápida operación especulativa obtiene su confianza siendo invitado a la fiesta que en el Hotel Ritz ofrece a las más relevantes personalidades del Tout-Paris quedando prendado por Evelyn, la joven mujer del magnate. El atentado de Sarajevo es el detonante. La Primera Guerra Mundial estalla. Mark Reber debe huir de París. Tras una breve estancia en San Sebastián, donde aún perdura el glamour de la belle époque, parte para Nueva York, en busca de la neutralidad americana; pero también de la mujer que lo cautivó. Nueva York, sin embargo, le deparará grandes sorpresas. El 1 de mayo de 1915 sale del muelle neoyorquino el Lusitania, el transatlántico más grande, lujoso y rápido que existía en el mundo. Evelyn debe viajar en él. La Embajada del Imperio alemán publica una grave advertencia. A su paso por la zona de guerra será considerado objetivo militar. Mark Reber, tras conocer el aviso, se embarca en el último momento para ir junto a Evelyn. El 7 de mayo, estando ya cerca de Liverpool, un submarino alemán torpedea y hunde en 18 minutos al Lusitania, con 1.959 personas a bordo. El suceso sigue siendo uno de los mayores misterios y enigmas de la historia. ¿Qué armamento portaba en sus bodegas? ¿Cómo pudo un solo torpedo hundir un barco de 35.000 toneladas? ¿A qué se debió la segunda explosión? ¿Por qué no fue escoltado por los destructores ingleses en la denominada zona de guerra?… Cuando todo era sabido desde la secreta Sala 40 británica. ¿Negligencia o complot para que Estados Unidos entrara en la guerra?