Klotz, Claude
El jefe de brigada, Cornier, descolgó el teléfono. No dijo ni una palabra, volvió la cabeza violentamente y se precipitó por las escaleras derribando dos sillas y un montón de carpetas. Cogió sin detenerse una pistola ametralladora y gritó a los hombres que estaban jugando a las cartas por los rincones de la habitación: \"A los coches, le han localizado, han localizado a Reiner!\"