Forster, Edward Morgan
La señora Moore y la señorita Questad viajan a la India. En su ánimo no influye ninguna clase de prejuicios. Sin embargo, al llegar a su destino se encontrarán con todos los prejuicios posibles: los de los colonizadores, arrogantes en su dominación, y los de los colonizados, susceptibles ante cuanto implica su situación de subalternos. Unos y otros representan a dos culturas opuestas, radicalmente distintas, condenadas a comprenderse y, al mismo tiempo, a rechazarse.Pese a todo, Pasaje a la India no es un libro político, aunque denuncie actitudes y abusos y su acción se desarrolle en un territorio sometido al gobierno de una metrópoli y en una época más o menos efervescente. La realidad es que es una obra que, además de contarnos las circunstancias de unos personajes que viven a fondo toda la emoción de su experiencia particular, trata con ternura y humor, pero también con poesía y profundidad, del choque de dos civilizaciones, del imposible encuentro entre dos formas de ser y de ver el mundo. Dos posturas representadas por dos protagonistas antagónicos. El director cinematográfico David Lean convirtió la novela en una de las películas de mayor éxito filmadas en los últimos tiempos. La riqueza de la obra narrativa no pudo reflejarse totalmente en el film. Por eso, la lectura de la novela sorprenderá a quienes hayan visto la película. Y deleitará enormemente a quienes no la hayan visto.