Baroja, Pío
La publicación de AQUÍ PARÍS era necesaria después de AYER Y HOY. Si en una nos contaba don Pío su salida de España al comienzo de la Guerra Civil, en esta nos narra su vida en la Casa de España de la ciudad Universitaria, en París, donde llegó después de su paso a Francia.
Eran días de zozobras e inquietudes, en los que vivió de colaborar en "La Nación" de Buenos Aires, por trescientos francos al mes. Artículos que habrá que publicar algún día.
En AQUÍ PARÍS nos cuenta también su vuelta a España y el viaje que hizo a Salamanca en plena Guerra Civil, cuando le hicieron jurar sobre la Biblia y El Quijote. También reafirma su asco por la política y su fuerte posición individualista a pesar de su pobreza, y hace un desfile de personajes con una gran riqueza de opiniones y comentarios. Aclara, una vez más, la titulación y el contenido de JUDÍOS, COMUNISTAS Y DEMÁS RALEA, y cuenta la polémica que se suscitó en el Ateneo madrileño sobre LOS VISIONARIOS, y las enemistades creadas por la publicación de su novela EL CURA DE MONLEÓN.
Pero lo más destacado de este escrito son sus juicios y análisis políticos y filosóficos sobre los momentos que vive, también sobre la cultura y el arte, junto a un constante fluir de personalidades y personajes que pasan por sus páginas en cortas y acertadas descripciones. Alcalá Zamora, Besteiro, Largo Caballero, Marcelino Domingo, Chaves Nogales, Antonio Machado, pasan ante sus ojos.
El tema, tan repetido, de su misoginia y el de su antisemitismo los aborda y hace una defensa del pueblo judío, lo mismo que de la cultura alemana.
No faltan abundantes descripciones del París de la guerra, de su tristeza y de tipos que insertaría después en su novela EL HOTEL DEL CISNE.
Al final, bajo la amenaza de la ocupación alemana, su vuelta a la frontera de España, el final trágico de un grupo de amigos y la entrada a Vera de Bidasoa.
AQUÍ PARÍS fue publicada en 1955, dentro de la Colección "El Grifón" y no ha vuelto a ser impresa. La primera edición llevaba una cubierta amarilla, y sobre uno de los dos ejemplares que se conservaban en Itzea, con correcciones del propio don Pío, se ha confeccionado el texto que hoy presentamos. La cubierta es la de un cuadro de su hermano Ricardo, que representa los alrededores del Sena y fue pintado en 1928.